El Fuego Griego se basaba en una sustancia extremadamente inflamable que, según varios recuentos de la época, ardía hasta debajo del agua. Era el arma más mortífera de las flotas y ejércitos de asedio bizantinos y sus enemigos temblaban con solo nombrarla. Tal ventaja le otorgaba al Imperio que esta se mantenía con el mayor de los secretos, tan bien guardada fue su fórmula que al día de hoy es un misterio y nadie sabe como reproducirla. este arma era similar a un lanzallamas de hoy en día, que funcionaba de tal forma que guardaba el liquido inflamable en un depósito, que al devolver hacia atrás una barra, entraba el liquido, así que solo bastaba con volver a empujar la barra, para que se produjese una bola de humo que quemaría a los enemigos no deseados.
Encontré varias imágenes muy interesantes, pero donde mejor se ve el arma y lo explican mejor es el video que os dejo a continuación, donde también prueban el arma tan curiosa, espero que os haya gustado!
Víctor Pérez 4B
ResponderEliminarMadre mía que curioso lo que hacían los griegos ya en esa época. Ahora como lo consigan alguno de los grupos terroristas que hay no sé qué pasará